Antecedentes
Presentación: La presentación de
un informe está constituido por la portada y el índice o tabla de contenido; a
continuación se describe los elementos básicos a considerar en la redacción de
estos aspectos:
Portada: Es la primer página del informe y permite la identificación del
documento, que consta del título del informe, el nombre del autor y/o autores,
la fecha en la que se presenta. El título del informe proviene del objetivo
general del informe técnico.
Es el primer
contacto del lector con el trabajo que se le ofrece y por ello la portada debe
contener en pocas palabras la información necesaria y suficiente para dejar en
claro a qué se refiere el texto e interesarlo en la lectura.
Índice o Tabla de Contenido: Lista los títulos
principales y la página en que aparece cada uno de ellos. Enlista los
subtítulos debajo de su título principal correspondiente. Lo importante de esta
sección radica en que proporciona un esquema del reporte; el lector sabrá
inmediatamente donde buscar lo que le interesa.
Introducción: En esta parte del
informe se presenta brevemente una descripción de lo que se trata el informe
respectivo, con el propósito de situar al lector y ofrecer un marco de
referencia.
Antecedentes: Es la contextualización que servirá
para que el lector tenga conocimiento de qué se trata el informe respectivo,
¿Qué tipo de hechos se desea esclarecer?, ¿Desde cuándo se presenta?, ¿Cómo
afectan la realidad?, etc.
Período que abarca y dónde se realizó: Todo informe técnico
debe explicar brevemente el período que abarca el tema que se presenta en dicho
informe, seguido del lugar en donde se realizó la investigación efectuada.
Objetivo General: Los objetivos son
los propósitos del trabajo, expresan el fin que pretende alcanzarse y por lo
tanto todo el trabajo se orientará a lograr ese objetivo. El objetivo general
es la gran pauta a seguir dentro del proceso que se quiere investigar,
estudiar, demostrar o conocer. Los pasos que nos llevan a su logro son los
objetivos específicos.